Una entrevista de cerca con el dominicano que vino a CR a darnos un concierto y a presentar su disco.
Como la mayoría habrá intuido, este espacio se llama LA NECEDAD y no “la tranquilidad”. Pero estos días en los que la lluvia nos ataca a partir de la 1 p.m. –o antes– he estado revisitando algunos discos más tranqui. El nuevo vinilo de Walter Ferguson, Master of Calypso, ha sido gran compañía. K.T.S.E de Teyana Taylor es de mis discos favoritos para este mood y hasta el 7 de Beach House entró en rotación.
Por eso me emocioné al saber que uno de mis cantautores favoritos, Alex Ferreira, había estrenado disco: En lo que llega la primavera. Alex es dominicano, alto y curioso, es una persona que hace preguntas, indaga, siempre quiere aprender y sacar 5 minutos para hablar sobre Walter Ferguson o cualquier otro músicos que le obsesione.
Su música tiene un magnetismo muy suyo que no logro explicar. Alex tiene la capacidad de transformar expresiones tan poco sutiles como “contigo me meo de risa” en algo tierno. Toda canción suya tiene un ritmo de tinte caribeño, un pulso que se balancea con la tranquilidad de su guitarra acústica. En lo que llega la primavera me hizo bajar revoluciones estos días y lograr escuchar música acústica y más tranquilita (una tarea casi imposible en 10+ años).
Escuchando frases como “Te pido una entrada, una salida, no me sabes dar ni una cosa ni la otra…” me queda claro que su materia prima son las palabras sencillas. Ahí me puso a pensar: ¿Cuántos años lleva Alex con el corazón roto y cómo no se ha cansado? ¿Cómo hace uno para mantenerse escribiendo canciones así de honestas y bonitas tantos años?
Por suerte Alex Ferreira vino a San José, a dar un concierto organizado por CREAM. Él me concedió una entrevista en el hostel Selina, a solo unas cuadras de mi casa. Esta fue nuestra tercera conversación y quizá por eso noten que había algo de confianza, de poder preguntar y de que me contara cosas inesperadas. Las dudas se disiparon, otras se exacerbaron, pero por fin le pude preguntar cómo fue escribir “Segundo Plano” y cómo es viajar por Latinoamérica con un tour que anuncia el “fin” de una pandemia…
Carlox: Me acabás de decir el nombre de un montón de ciudades donde has tocado. Yo sé que has vivido en España, en México. Todo este asunto de cuarentenas y todo eso, ¿dónde te agarró?
Alex Ferreira: Me agarró en México, pero después de un tiempo conseguí escaparme a Dominicana, me alquilé una casa en la playa. Lo necesitaba.
Carlox: En todo el contexto global y personal tuyo, ¿cómo fue hacer el trabajo de los discos Tanda y En lo que llega la primavera?
Alex Ferreira: Pues todo se atrasó y nos atrasó el disco, no lo pudimos sacar por razones obvias. En ese impasse digamos terminé de mezclar, masterizar Tanda. Me fui a Dominicana, ahí hicimos la portada del disco y grabamos vídeoclips allá, también.
Y nada, fue todo ese proceso de lanzar el disco en medio de toda la pandemia, sacar algunos singles. No te voy a decir que no fue raro, pero... Pero era necesario, no podía tener ese material ahí atorado. Y curioso, porque la primera canción que sacamos se llama “No se rompe” y, por cosas de la vida, mucha gente dijo que la letra de esa canción que le ayudó en ese momento.
Ese fue, digamos, el primer año pandémico y luego, me tocaba terminar el segundo disco, En lo que llega la primavera. Ahí me entretuve grabando y escribiendo y produciendo y me dió por mezclar. Mezclé ese segundo disco, lo mastericé yo, también. Aproveché ese tiempo y energía para meterme más en temas de ingeniería de sonido.
Carlox: Usaste el tiempo para aprender, muy on brand. ¿Los produjiste solo entonces?
Alex Ferreira: Los dos los produje con muchas personas, pero para mí son iguales. Osea, vamos a ver, son muy diferentes, pero para mí es lo mismo, porque salieron al mismo tiempo, se grabaron en el mismo estudio con los mismos músicos. Podría haber sido un solo disco, pero yo decidí separar las canciones más tropicales de Tanda de las más nostálgicas, las más anglosajonas quise ponerlas en otro lugar.
Carlox: Son como discos hermanos. ¿Dónde los grabaste?
Alex Ferreira: En El Desierto Casa Estudio, a 40 minutos fuera de la Ciudad de México y algunas cosas en mi casa.
Carlox: Ahí trabajó Debi Nova, creo que ella grabó 3:33 allá.
Alex Ferreira: Claro, cómo no, tengo que hablarle a Debi, a ver si anda por aquí.
Después de nuestra entrevista, Alex Ferrerira dio un pequeño show acústico.
Carlox: Este nuevo álbum me calzó muy bien con estos días de lluvia en los que estamos entrando y con el confinamiento, también. ¿Por qué le pusiste ese nombre? ¿Por qué quisiste reflejarlo de esa forma?
Alex Ferreira: Bueno, En lo que llega la primavera me evoca una espera. Yo siento que el disco tiene esa espera: es un disco que esperó mucho para salir, esperé a tener las canciones adecuadas para completarlo, durante la pandemia estábamos esperando salir adelante, salir a tocar. La primavera representa también una nueva vida, un nuevo comienzo y en algunas canciones hablo de la primavera. Como que es un tema que empezó a surgirme.
Escuchaba mucho un disco Bill Evans, que se llama You Must Believe in Spring, que es un disco muy triste, pero el título te dice 'debemos creer que hay en la primavera, que sale de todo esto'. Estaba escuchando mucho ese disco, pero no sabía que que iba a usar algo así de título hasta que en un Uber alguien en la radio, dijo ‘En lo que llega la primavera, no sé qué’. Pensé ‘esa frase podría ser una canción en mi disco’ y luego, poco a poco, se convirtió en el título.
Carlox: Curiosa la referencia a Bill Evans, porque justo la canción que le da el título al álbum tiene su saxofón y es jazz...
Alex Ferreira: Sí, los últimos cuatro o cinco años de mi vida he escuchado más jazz que otra cosa.
Carlox: ¿Cómo ha informado eso tu proceso de cantautor? ¿Cómo informa el jazz (instrumental) el hacer música con letra?
Alex Ferreira: No, no, digamos. Yo no leo música y no me considero músico; cuando yo veo a mis amigos que leen música, yo me siento un impostor. Realmente yo tengo el síndrome del impostor, en ese sentido. Lo mismo cuando hablo con un poeta. O con un repentista o con alguien que hace décimas; ahí también me siento un impostor. Yo siento que el organismo de la canción es otro y uno agarra elementos para hacer un pequeño muñequito de barro. Pero en temas de jazz, lo que sí te puedo decir es que José Andrés Márquez, el baterista de mi banda, es un ultra mega jazzero y Jos Parker que toca el teclado, también es muy jazzero. Mis amigos son todos jazzeros, pero desde luego yo me dedico a otra cosa muy diferente.
Carlox: Hablando de nuevo de significados. Hay una canción que se llama La Verbena y...
Alex Ferreira: Y el Moriviví.
Carlox: ¿Qué significa ese? El título me gustó mucho y la canción tiene esos strings, es muy elaborada.
Alex Ferreira: Bueno, mira que te hablaba de la primavera, ahí está la primavera en esa canción mencionada, esa es quizá de mis favoritas del disco. El moriviví es una planta que si la tocas se marchita, se contrae. En Costa Rica debe llamar mimosa o algo...
Carlox: ¡Dormilonas! Y el nombre científico es mimosa púdica.
Alex Ferreira: ¡Exactamente! Según cada país de Latinoamérica que tiene un nombre, pero es una planta que se encuentra bastante en Latinoamérica. Y te hablaba de la primavera como un nuevo nacimiento, como empezar de nuevo y siento que esa planta lo representa de la mejor manera porque la primavera se contrae, se marchita y luego vuelve. Y la vida es así, todo en la vida es así. Tiene un principio, tiene un fin y se repite.
Y bueno, esa fue una canción muy rara porque fue de esas canciones que salieron rápido, no pensé... De hecho, a día de hoy hay cosas que no entiendo, pero es una canción muy especial, tiene algo ahí en la música que no sé de dónde vino la verdad. Pero la agradezco mucho (se ríe).
Carlox: Una canción que también me dio curiosidad, por su letra, fue “Segundo plano”. Conecté desde la primera vez con ese sentimiento de espera y de buscar compañía; de cuando te llegaba un plan y alguien te decía ‘voy a llegar a tu casa’ y detenías la vida entera, porque durante dos años recibir visitas fue muy complicado. Quería que me contaras de la experiencia de hacer esa canción.
Alex Ferreira: Pues fíjate que esa canción -muy poca gente lo sabe-, pero tiene una historia muy triste detrás. Mi chica y yo estábamos esperando un hijo y perdimos un embarazo. Entonces, en un momento, fuimos al médico y él dijo ‘no se sabe qué onda, no se sabe qué va a pasar, si vamos a hacer algún tipo de operación’. Había semanas donde nosotros no sabíamos si el embarazo iba para adelante o para atrás. Al final todo el punchline de la canción es ‘si te da por venir, todo va un segundo plano’. Para no acabar en pura tristeza, te cuento que estamos esperando una niña, va a nacer en septiembre y estamos muy felices y está todo bien y todo va a salir bien y estamos contentos.
Esa canción salió de ese momento puntual que fue de hecho en medio de toda la movida de la pandemia y todo. Cuando la hice, se le enseñaba a la gente y todo el mundo la entendía como algo de amor, una canción de desamor y yo dije ‘Bueno perfecto’ (se ríe). Pero, pero sí fue un momento ahí raro de espera. Y otra vez: ahí está el moriviví, ahí está el renacer, ahí está el ciclo de la vida que atraviesa el disco.
Carlox: Otro par de, así como abstracciones: tenés esta letra que incluso tuiteaste el otro día que dice ‘y si me rompo la cabeza...’
Alex Ferreira: “Amor de paso”.
Carlox: Esa misma. Y en otra decís ‘no hay amante que no deje sangre en rosal’ y siento yo que siempre hemos conocido ese lado tuyo enamorado, idealista, pero de pronto aquí conociste una consecuencia y hay una medición de riesgo. Eso noté en este disco...
Alex Ferreira: ¡Claro!
Carlox: No quiero usar el cliché periodístico de “llegaste a la madurez”, pero de pronto y sí se percibe dentro del disco.
Alex Ferreira: Sí, o sea, ahí está “Me la saludan”, ahí está “Maldita mirada”, un montón de canciones de despecho. Pero ya luego cuando te pasa mucho (se ríe)… Cuando ya tienes el callo del desamor, ves quizás la cosa de otra manera e incluso lo agradeces, porque te hace la persona que eres, aprendes, mejoras. Entonces sí, es verdad que no hay amante que no deje su sangre en el rosal, pero eso es parte del aprendizaje de la vida.
Carlox: Sí, eso me pareció muy interesante. Porque yo digo, ‘¿cómo hace este tipo para siempre escribir canciones de romperse el corazón? Y continuar y continuar....
Alex Ferreira: Bueno (se ríe). También es verdad que ya luego uno en el momento de la vida que yo me encuentro ya uno tiene una caja de Pandora, un baúl de recuerdos y yo te puedo escribir una canción de desamor ahora mismo. Saco de ahí cosas y bueno, también uno trabaja con la ficción. La vida de un ser humano no es tan interesante todo el rato como para sacar libros y canciones y películas. Más bien uno toma también de la ficción, como hacen los mejores autores del libro y película, pero siempre hay algo de la vida personal ahí.
Carlox: Dentro de esa misma línea, mientras escuchaba los discos pensé ‘mantenerse así de consistente debe ser difícil’, pues yo considero muy personal que soy muy consistente y muy bueno escribiendo...
Alex Ferreira: Gracias.
Carlox: Te quería preguntar, ¿hay una rutina o ejercicios en tu escritura? Como decir, ‘hoy me voy a sentar a escribir...’
Alex Ferreira: Curiosamente, ese trabajo, yo no tengo idea de nada de eso, porque cuando digo ‘me voy a sentar y voy a escribir una canción’, cien por ciento de las veces no sale. Las cabronas siempre aparecen en el momento menos indicado, te agarran en un momento raro. Yo creo que el trabajo de uno es estar alerta y observar. Sí, creo que hay que trabajar y que hay que agarrar el instrumento siempre que se pueda y que hay que leer y que hay que inspirarse. Hay que viajar y conocer gente hay que ponerse en situaciones, que hay que salirse de la zona de confort, etc. Pero al fin de cuentas uno no lo maneja.
Escuchando una canción de Drexler del disco nuevo, se llama ‘Tinta y tiempo’, habla precisamente de eso. La canción dice que él no comanda esa voz que el corazón siempre anda por libre.
Carlox: Hablando de la inspiración, en estos últimos años, varios artistas pop han incorporado la bachata en su repertorio y yo quería preguntarte –como dominicano y como músico –, ¿qué te parece? ¿Lo ves escéptico, lo ves como algo bueno?
Alex Ferreira: Bueno que lo veo como algo buenísimo. Yo no creo que exista de ninguna manera la apropiación cultural, no soy de los que piensan así, no soy ningún purista. Cuando un español o un argentino hacen una bachata, lo hacen diferente y la bachata sigue evolucionando, como ha evolucionado el rock y como ha evolucionado todo. Cuanto más viajo por Latinoamérica, más me doy cuenta de que tenemos muchísimo más en común de lo que pensamos en todos los ritmos.
Carlox: Las dos veces anteriores que hemos hablado te he hecho esta pregunta entonces tengo que hacerla una tercera vez.
Alex Ferreira: ¿Y qué no te la contesto o qué?
Carlox: No, sí me la contestás, pero quería cerrar el 3, tengo un tatuaje que es un 3, entonces siento como que tengo que...
Alex Ferreira: Yo también (me señala un triángulo en su muñeca izquierda).
Carlox: Mirá yo tengo este triángulo con un 3, también. Debi Nova me señaló este tatuaje y me dijo en secreto que el nombre de su disco iba a ser 3:33, fue muy curioso.
Alex Ferreira: Yo nací el 23 del mes 3 del 83, no sé si te lo dije.
Carlox: Eeeh, yo también nací el 23 del mes 3.
Alex Ferreira: ¿Tú eres de marzo 23? ¿En serio?
Carlox: (estallado de risa, no puede ni hablar)
Alex Ferreira: ¿Y tú sabías que yo era de marzo 23? ¿Lo buscaste?
Carlox: ¡No tenía ni idea!
Alex Ferreira: Qué coincidencia, oye, qué cosa...
(pausa para tomar aire y abrazarnos porque nos sentimos high on life)
Carlox: Bueno, la pregunta ahora sí: ¿Cuál es la película que hace maridaje con este disco este más reciente?
Alex Ferreira: Uuuh, claro. Antes habíamos hablado de películas y de los fans que somos de las películas. ¿Qué película habla de la primavera? Mira, fíjate que no te tengo una respuesta, no la había visto de esa manera. Tengo que pensar, no tengo respuesta.
Carlox: Todo bien, todo bien, lo que aprendí hoy fue más gracioso. Ya terminando, vi que pusiste un tuit de que hayas captado “Creep” de Radiohead aquí mismo. ¿Esa es tu canción go-to de karaoke?
Alex Ferreira: ¡Sí, claro!
Carlox: ¿Por qué?
Alex Ferreira: Hay algo de loser en el karaoke y me gusta eso. Cuanto más loser seas en el karaoke, mejor eres. Cuanto más borracho estés y cuanto más triste sea todo, aunque desafines, no importa, aunque cantes fatal, no importa. El karaoke es para que todo el mundo cante, para que todo el mundo toque suelo. Y yo creo que “Creep” tiene esa letra.
Carlox: Sí, a mí a mí me parece raro cuando llega al karaoke alguien que canta muy bien y toda la gente se inhibe, se siente mal, la gente se enoja, yo me enojo, ‘¿por qué viene a cantar un profesional aquí?’.
Alex Ferreira: No, es que no, no se trata de eso, ¡yo canto fatal en los karaokes!
Carlox: ¿Cuál ha sido la parada más loca o memorable de este de este tour?
Alex Ferreira: Quito, sin duda, porque llegamos y había un paro nacional. Tocamos en Guayaquil antes y ya sabíamos que iba a haber un paro nacional por un tema ahí sociopolítico con los indígenas y el gobierno y nos tocó llegar a Quito y encontrarnos con una barricada de fuego de llantas quemadas, habían cerrado la calle completamente. Y también me gustó mucho en Quito enterarme de todo el tema político y de saber que la comunidad indígena saca presidentes y eso me encanta, me encantó. Una pena que se canceló el concierto, pero luego dije, ‘wow, hay hay países en Latinoamérica que tienen que la comunidad indígena tiene este poder’ y se me hace súper importante.
No es para nada agradable llegar a un país y que te digan ‘come en el aeropuerto porque todo está cerrado’, pero bueno, al final pudimos hacer un (concierto pequeño) acústico en el hotel para algunos fans que vinieron, de una manera muy sana y muy controlada. Eso fue lo más loco que me ha pasado de giras, sin duda.
Carlox: Hablando de toda esa locura e intensidad que se encuentra en el camino, ¿cuánto tiempo más te gustaría hacer esto? ¿Te gustaría estar como Ferguson grabando a sus 80 años?
Alex Ferreira: Pues sí, creo que creo que sí, yo creo que... Se me hace un buen plan (ríe). Es que la música para mí terapéutica, me conecta con el niño interno, me hace sentir más vivo que nada. La pandemia me hizo aprender a valorarlo más, a quejarme menos. La decisión la tomé a una edad muy temprana. Esto lo llevo sabiendo desde hace mucho tiempo: quiero dedicarme a la música hasta que no pueda más.
Hice las de Nardwuar y le regalé a Alex un disco de Walter Ferguson. Gran noche.